lunes, 28 de julio de 2014

¿Salir del closet ya paso de moda?

En otros tiempos, ser gay era algo muy personal y un tema tabú. Salir del closet era como wow.. pero en estos tiempos ya no lo es.. ¿o si?
Antes era admirable ver un joven saliendo del closet y decir MIRENME, SOY GAY ORGULLOSO Y NO ME IMPORTA LO QUE PIENSEN!. y ahora pienso "cállate, ya paso de moda y es algo casi normal".
Estamos en pleno 2014 y, en mi opinión, ya no es tan revolucionario que un chico acepte ser quien es públicamente. 


No niego el hecho de que los jóvenes que viven en el closet tengan miedo de las reacciones, pero eso de reunir a la familia o a los amigos y confesar su homosexualidad.. ya no va chicos..

Hace semanas, hablando del tema de la adopción en familias homoparentales en mi escuela, perdí los estribos y comente mi punto de vista, siendo homosexual.
creo que esperaba una reacción de sorpresa o incluso burla. pero para mi sorpresa fue un "me da igual".. y  luego al comentarle lo ocurrido a mi hermana mayor, su respuesta fue "ser gay es algo casi normal.. ya no significa ser especial ni nada parecido."

Comente este mismo tema en un foro gay de mi ciudad, a lo que solo recibí insultos por "denigrar la decisión individual de salir del closet".. por supuesto que me reí.

Así que cuando leo en Facebook a chicos publicando esos discursos de párrafos y párrafos explicando porque se mantuvieron escondidos (aunque evidentemente mostraban su homosexualidad) y sienten que nadie los entiende y son incomprendidos, simplemente diré "otro mas" ..



Tecnología: ¿una vida fácil o una vida dependiente?

Vivimos en tiempos donde estamos permanentemente bombardeados por la tecnología. Queramos o no, la tecnología está involucrada en la mayor parte de nuestra vida cotidiana. Ya sea en Smartphone, computadoras, tablets, electrodomésticos inteligentes y hasta en vehículos y en las populares “Smart houses”.

Uno aprende a aceptar este suceso pero, ¿somos conscientes del uso que le damos y cuanto afecta nuestras vidas?

Cada vez más objetos se vuelven “objetos inteligentes” ¿qué quiero decir? Los teléfonos cada vez se convierten más en computadoras de 4 pulgadas que en teléfonos, los vehículos pueden ser controlados de forma remota e incluso casas que el “cerebro” de la misma es una Tablet, que controla desde la temperatura del agua hasta las cortinas.
El avance de la tecnología no se ve solo en los aspectos materiales, si no en las generaciones que cada vez fueron experimentando los cambios que fueron modificando al mundo en todos sus aspectos.

Pensemos en los adolescentes del siglo xxi, también conocida como la generación Z. una generación que está conectada permanentemente por cualquier medio, que nacieron y se criaron con un dispositivo electrónico en sus manos. Si los comparamos con otras generaciones como la X (una generación que abarco desde 1945 a 1975) y la Y (abarco desde 1980 hasta el 2000, integrado especialmente por adultos que quieren incursionar en el mundo de la tecnología) se ven cambios bastante notables en sus actividades cotidianas, desde el traspaso de leer un libro en la biblioteca a descargarlo por internet, visitar a un amigo a su casa a verlo por otros medios como video llamadas y la tendencia a aislarse cada vez más y suplantar la presencia humana por la virtual.

La generación Z tiende a aislarse y ser muy tecno-dependientes al punto que no pueden pasar más de una hora sin estar online en las diferentes redes sociales.
Personalmente, no creo que tanta tecnología sea saludable. Uno piensa que exagera cuando se dice esto, pero la realidad es otra. Con el avance tecnológico se registran más dolores de cabeza, debido a la intensidad de brillo y color de las pantallas de los dispositivos, problemas de espalda debido a la mala postura a la hora de usarlos, ansiedad, problemas auditivos y de articulación, adicción, obesidad e incluso afectan severamente el estado anímico.

Siendo adolescente, admito que no puedo estar al día sin utilizar algún que otro dispositivo electrónico. Ya con 19 años no permito que la tecnología me domine. Pero no todos tienen la misma posibilidad (suena tonto, pero los casos de adolescentes con sobre dependencia a los celulares aumento tan notablemente, que está siendo catalogado como la enfermedad del siglo XXI: la nomofobia).

Mi celular era mi vida, básicamente todo estaba ahí, guardado entre chips y botones. No tengo celular desde mediados de marzo y puedo afirmar que algunos aspectos cambiaron de mi vida. Tantos buenos como malos.

A eso le sumo que estuve sin computadora un tiempo, así que puedo garantizar que vi todo desde otro punto de vista. Sin darme cuenta, notaba como mi salud iba empeorando y como mis amistades que pasaron de ser físicas a ser presencias virtuales, se iban marchitando. 
Y ahí me di cuenta, hasta qué punto la tecnología ya es parte de nuestra vida. Perdí contactos con amistades ya que, entre la comodidad de comunicarse con alguien por whatsapp o Facebook a ir a su casa y verlo en persona, mis amigos preferían la comodidad al esfuerzo, y siendo tan joven tenía los mismos problemas de salud que un hombre de 40 años.

La tecnología nos vuelve perezosos y flojos.
Por eso me pregunto ¿Qué haríamos sin la tecnología? ¿Podríamos dejar de ser tan dependientes de la tecnología y continuar con nuestras vidas como lo hacían en otros tiempos?

Tal vez podríamos volver a los días en que un niño jugaba en la plaza en lugar de jugar y aprender con una Tablet, un teléfono era un teléfono y nuestras vidas eran controladas por nosotros mismos y no por un aparato electrónico.